En su intervención de la 79° Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la mandataria de Honduras, Xiomara Castro, enfatizó temas cruciales para el país y la región.
Detalló, que «hoy estoy amenazada por las mismas fuerzas del capital que hace quince años dieron un golpe de Estado al presidente Manuel Zelaya”.
Además, que la conspiración contra su gobierno obedece a que ha “impulsado
cambios estructurales del modelo económico. Ha denunciado el injusto régimen tributario que perpetúa desigualdades, alimenta a los poderosos y explota a los pobres”.
«La paz, la justicia, la libertad y la democracia continúan siendo valores fundacionales de nuestra nación y por ello no aceptamos su secuestro por parte de diez familias más poderosas en Honduras que se han apropiado de nuestros principales recursos económicos que se niegan aceptar los cambios que impulso”, apuntó.
También criticó las políticas neoliberales privatizadoras que continúan deteriorando el acceso a los pueblos, a los servicios de
agua, energía, salud, educación, trabajo y la seguridad social.
Concluyendo su participación haciendo un llamado a la cooperación internacional, instando a los países miembros de la ONU, a trabajar juntos para enfrentar problemas globales como la pobreza, la violencia y el cambio climático, reafirmando el compromiso de Honduras con el desarrollo sostenible y la justicia social.
